Las grandes fábricas tienen zonas de mucho ruido, generalmente y salvo zonas estancas a la maquinaria, se habilitan cabinas insonorizadas para el
descanso, reuniones o convertidos en comedores.
En algunas oficinas por sus dimensiones y actividad frenética también presentan un ambiente algo estresante y ruidoso, de ahí que tanto en fábricas como en grandes despachos donde trabajan muchas personas, se precise de un área de descanso donde sus empleados puedan tener unos momentos para desayunar o socializar entre compañeros.
El descanso y las pausas parciales en un puesto de trabajo ayuda a reponer el estado físico y mental, por ello se han de establecer zonas con el fin
de mejorar el rendimiento de los trabajadores, siendo cada vez más las empresas las que se preocupan por reducir el ruido en el puesto de trabajo.
El problema del exceso de ruido es bien conocido y afecta al rendimiento de determinados trabajos.
Existen cabinas insonorizadas para la propia maquinaria y también se aprovechan determinados materiales para adaptarlo a áreas de descanso del
personal. Estos materiales destacan por su poder de aislamiento, usándose textiles para revestir como el algodón ignífugo en combinación con el poliéster.
Pero no solo las cabinas insonorizadas son un recurso para espacios industriales, también el mercado ofrece este tipo de soluciones para otros
sectores, tales como cabinas para dar clases On-line, cabinas insonorizadas para dormir en los ya famosos hoteles cápsulas, cabinas para academias
musicales y escuelas de sonido/audiovisuales, etc…
Este tipo de cabinas pueden ser rígidas si el revestimiento se realiza sobre un panel o flexibles si se acondiciona un espacio con cortinas acústicas
mediante rieles.